Quién de nosotros no ha visto la existencia como un presente funesto? Vemos que TODO en el mundo no es sino una ilusión, y que la vida misma no es más que un sueño… Llegamos a un lugar donde vienen a terminar los temores y las esperanzas… Nos sentimos morir…
Es entonces cuando aparecen dos opciones… 1) Hundirnos hasta lo más profundo, y quedarnos inmóviles en ese lugar, hasta desaparecer, o 2) Tocar fondo, impulsarnos y como el ave Fénix resurgir de nuestras cenizas y renacer física y espiritualmente con toda nuestra gloria!!! Según el mito, Phoenix poseía la virtud de que sus lágrimas fueran curativas, y es verdad… cuando lloramos limpiamos nuestra alma y poco a poco la aliviamos; eliminamos el dolor y los temores... Nuestras lágrimas se deslizan naturalmente a nuesta boca para ser bebidas y como un elixir de los dioses Sanarnos…
Otro símbolo relacionado al Ave Fénix es el de la Esperanza, representa un valor que nunca debe morir en nosotros. Es precisamente eso lo que nos mantiene con vida… la esperanza de poder cambiar renacer, resurgir, rehacer…
Hoy casualmente encontré estas palabras “muchas veces debemos enfrentar el hecho de que tal vez nuestros sueños nunca se hagan realidad…Pero saben qué? no vivimos por la realización de los sueños sino por la posibilidad” Aquí y ahora, me comprometo a luchar por esa posibilidad, es por eso que he renacido…
Como un nuevo Fénix acumularé todo el saber obtenido desde mis orígenes, e iniciaré un nuevo ciclo de inspiración…
